A las 12:41 de este sábado, el excomandante en jefe de la Armada, Edmundo González, publicó en su cuenta de Twitter un texto que decía que Estados Unidos “acaba de descubrir al hombre que fabricó y vendió el virus Corona a China. Dr. Charles Lieber, jefe del departamento de química y biología de la Universidad de Havard (SIC), EEUU. Fue arrestado hoy según fuentes del departamento estadounidense // se comienza a saber la verdad” aseveró, poniendo al final de la frase un emoticón de dedo pulgar levantado. Debajo del texto, en tanto, estaba enlazado el video de una conferencia de prensa del Departamento de Justicia de EEUU en el cual se anunciaba la detención de Lieber.
Como muchas personas hicieron ver a González, el video es del 29 de enero de 2020, cuando Lieber fue efectivamente detenido, pero además de que la fecha no corresponde (lo cual es una de las estrategias de desinformación más frecuentes en las redes sociales: mostrar como actual algo que no lo es) hay otros dos problemas de fondo.
El primero de ellos es que Lieber no creó ni vendió el coronavirus, y eso dice relación con el segundo problema: el coronavirus es producto de una zoonosis; es decir, de una transmisión de animal a humano, como está ampliamente probado en términos científicos. El último informe al respecto de un artículo publicado hace dos semanas en la revista Nature, que se puede leer en este enlace.
Por ende, todo el tweet es falso, y de hecho pareciera ser que en este caso (a diferencia de otras situaciones semejantes) el exalmirante terminó convenciéndose y borrando el tweet.
En todo caso, es necesario decir que González no fue el primero en diseminar esta noticia falsa, pues esta circula desde hace varios días en Twitter y Facebook, como se aprecia en la foto principal.
Lieber y los chinos
Como dice la propia acusación del FBI en contra de Lieber y otros dos profesores chinos, que se puede leer aquí, este científico de la Universidad de Harvard era especialista en nanociencia y se encontraba trabajando en el desarrollo de una nueva tecnología destinada a captar las ondas cerebrales (nada que ver con virus de ningún tipo) cuando fue detenido por la unidad de contrainteligencia del FBI en Boston.
Dicho arresto obedece a que desde desde 2008 hasta 2017 recibió 15 millones de dólares de parte del Instituto Nacional de la Salud (NIH) y del Departamento de Defensa de Estados Unidos (DoD). Sin embargo, señala el comunicado del Departamento de Justicia, “esas becas requieren comunicar cualquier conflicto de interés significativo, incluyendo financiamiento de parte de gobiernos o entidades extranjeras”.
El problema que descubrió el FBI es que desde 2011 que Lieber formaba parte de la Universidad de Tecnología de Wuhan (WUT), donde era considerado un “científico estratégico”, y formaba parte de un plan del gobierno chino destinado a atraer y reclutar a científicos extranjeros de alto nivel, a cambio de lo cual le entregaron 1,5 millones de dólares destinados a armar un laboratorio de nanotecnología en la WUT, así como un sueldo mensual de 50 mil dólares.
Interrogado al respecto en 2018, Lieber mintió, según las autoridades estadounidenses.
En síntesis, lo que hay detrás de las acusaciones en contra de Lieber tiene más que ver con la guerra comercial existente entre Estados Unidos y China que con el Coronavirus, y con un posible caso de espionaje (dada la vinculación de Lieber con el Departamento de Defensa, en el cual prestaba servicios de oficinas de investigación naval y aérea), aunque en sentido estricto, los únicos cargos que existen en contra del ahora exprofesor de Harvard son dos acusaciones por haber prestado falso testimonio ante el NIH y el DoD.